Tenemos el firme compromiso de proteger nuestro mundo.
Este mundo. El único que conocemos. De mantener siempre
vive esa inmensa riqueza en constante peligro llamada
naturaleza. Respetar? ¿Por qué no? Todo cuanto habita en
ella proteger por igual todo cuanto habita en ella.
Ella es aira, ella es agua, es tierra, ella es luz, ella es vida.
El firme compromiso de proteger este mundo del poder de la codicia y
del querer de la avaricia. Tenemos el deber de oponernos a
una lógica que aspira únicamente a convertirlo todo en dinero
y más DINERO.
Tenemos esa obligación con nosotros mismos
el devolver la vida. La vida que esta robando esa maldita
maquina de administrar dolor y sufrimiento, que llaman capitalismo.
Que nos hace pensar que somos mejores que
el resto de especies y que el resto de animales,
que pisan el mismo suelo, beben el mismo agua
y respiran el mismo aire contaminado por los hombres,
hombres y mujeres que se dicen superiores.
Hombres y mujeres que han sabido acomodarse
a la barbarie y a la injusticia de un mundo construido
a su medida.